El desarrollo de ARCoV, la vacuna de ARNm candidata de China, comenzó en marzo de 2020. ARCoV hace que el cuerpo haga copias del dominio de unión al receptor (RBD), una subparte clave de la proteína de punta del virus que se utiliza para adjuntar y entrar en las celdas.
Los resultados de diversos estudios, tanto en términos de si hay eventos adversos como de qué tan bien ARCoV previene la infección, la enfermedad grave y la muerte, dictarán el futuro de esta vacuna y el enfoque futuro de China para COVID. Si falla, ¿China buscará comprar algunas de las vacunas probadas de ARNm de Pfizer y Moderna? El tiempo dirá.
Publicado originalmente en El Financiero