La apuesta de Genomma Lab de aliarse con la empresa israelí Oramed Pharmaceuticals Inc para desarrollar una vacuna antiCovid que sea tomada y no inyectada como las que existen hasta hoy, está proyectada para que en unos 18 meses esté terminando su proceso de estudios clínicos y su potencial aprobación para salir al mercado.
Así lo prevé Rodrigo Herrera, fundador y presidente de Genomma Lab, quien expresó que en cuanto esté culminada la fase I en Sudáfrica y empiecen la fase II con estudios clínicos en personas, se tendrá claridad para considerar la opción de venta privada de la vacuna.
Publicado originalmente en El Economista