“Lo primero es [que] nunca esperamos que nuestras vacunas fueran tan buenas, tan efectivas”, dijo Monto. “Fue una sorpresa muy feliz para todos, y fue una sorpresa”.
Él y otros científicos observaron cómo se desarrollaba una vacuna contra el Covid-19 de forma más rápida y eficaz de lo que nadie se atrevía a esperar.
Luego, Monto observó con asombro cómo decenas de millones de estadounidenses se negaban a aceptarlas. “Aquellos de nosotros que estamos en primera línea aquí, en términos de desarrollo o evaluación, somos tan incrédulos acerca de que la gente no quiera vacunarse”, dijo.
Quizás la pregunta más frecuente que la gente ahora le hace a Monto es si las personas necesitarán una vacuna Covid “cada seis meses”, especialmente a la luz de la variante Omicron recientemente descubierta. Pfizer anunció recientemente que una tercera inyección de su vacuna de ARNm parece proteger tan bien contra Omicron como otras variantes.
Publicado originalmente en The Guardian